miércoles, 28 de noviembre de 2012

Escritores extremeños en los cementerios de España III



ESCRITORES EXTREMEÑOS EN LOS CEMENTERIOS DE ESPAÑA
Breves apuntes biográficos
Tomo III

Ricardo Hernández Megías
Madrid, Beturia, 2012, 338 págs.
Prólogo de Theófilo Acedo Díaz

Nacido en Santa Marta de los Barros (1948), Ricardo Hernández Megías abandona Extremadura para cursar estudios en Sevilla y, más tarde, en Madrid, donde ahora reside. Relacionado con las casas y los círculos extremeños de la comunidad de Madrid, publicó en 2004 los dos primeros tomos de Escritores extremeños en los cementerios de España (tomos I y II). Ha preparado las ediciones de El corazón al hombro (2009) de Luis Álvarez Lencero y Titirimundi sentimental (2010) de Ángel-Braulio Ducasse. Ese mismo año apareció en Sial Ediciones Poetas de la Extremadura exterior (1900-2010), primer tomo de una antología que recoge composiciones de poetas residentes fuera de la región. 
Ahora la Asociación Cultural Beturia publica el tercer tomo de Escritores extremeños en cementerios de España que acoge nueve aproximaciones biográficas y bibliográficas a los siguientes escritores: Nicolás Díaz y Pérez (1841-1902), Rafael García-Plata de Osma (1870-1918), José López Prudencio (1870-1949), Pedro Caba Landa (1900-1992), Eugenio Frutos Cortés (1903-1979), Eusebio García Luengo (1909-2000), Fernando Pérez Marqués (1919-1993), José Antonio Gabriel y Galán (1940-1993) y Jesús Alviz Arroyo (1946-1998).

El desierto verde



EL DESIERTO VERDE

Eduardo Moga
Mérida, Editora Regional de Extremadura, 2012, 45 págs.

Codirector de la colección de poesía de DVDEdiciones, Eduardo Moga (Barcelona, 1962) es autor de poemarios como Ángel mortal (1994), La luz oída (premio Adonáis de 1995), El barro en la mirada (1008), Unánime fuego (1999), El corazón, la nada (1999), La montaña hendida (2002), Las horas y los labios (2003), Soliloquio para dos (2006), Los haikús del tren (2007), Cuerpo sin mí (2007), Seis sextinas soeces (2008) y Bajo la piel, los días (2010). Ahora, la Editora Regional de Extremadura publica El desierto verde, un libro de poemas en prosa (excepto la composición de apertura) escritos en la localidad cacereña de Hoyos, en la Sierra de Gata, abiertos al paisaje de la aldea y de sus alrededores y a las emociones que suscita en el poeta. Reproducimos un fragmento del prólogo.

“Más allá queda el esplendor trunco de un convento, barbado de zarzas, y la delicada sencillez de la ermita, solo perturbada por las avispas, y luego se abren las extensiones abruptas de eucaliptos y olmos, de encinas y álamos, de chopos y alcornoques. También hay olivares y campos de labor, con perros que ladran como si fueran a devorarte, pero que transforman su ladrido en un husmear sumiso si te atreves a acercarte, y ovejas que se mueven como bandadas, con esa oscilación muscular, regida por una inteligencia inmaterial, de los muchos pájaros en el aire. Abundan los ríos, que acarrean el agua y las piedras, el ruido abrasador de lo azul y la multiplicidad líquida de lo que nunca cambia. El desierto verde pretende captar ese paisaje volátil e inmóvil; o, más bien, pretende captar el impacto de ese paisaje en mí: su transformación en lo que yo percibo, que se suma a su propia  y pétrea transformación”. [pp. 8-9]

sábado, 17 de noviembre de 2012

Cosas de clase



En clase un alumno pregunta:
-Simón, en la oración “Fátima dejó a Jaime” ¿cuál es el sujeto?
-Fátima.
-¿Y por qué?
-Porque fue ella la que dejó a Jaime.
-Y si la paso a pasiva queda “Jaime fue dejado por Fátima”, ¿no?
-Siiii.
   Eran preguntas demasiado bobas para el nivel del chico, quien, además, no dejaba de sonreír.
   En ese momento, el compañero de al lado (que se llamaba Jaime) se inclinó hacia él y le dijo en voz baja: “Maricón”.
   Por fin, otra alumna, riéndose, aclaró el enigma: “Es que es verdad”.

viernes, 16 de noviembre de 2012

Juegos infantiles de Extremadura


JUEGOS INFANTILES DE EXTREMADURA

Marciano Curiel Merchán
Mérida, Editora Regional de Extremadura, 2010, 193 págs.
Edición, introducción y notas de Pilar Montero Curiel y María Luisa Montero Curiel.


Aunque la Revista de Tradiciones Populares del Consejo Superior de Investigaciones Científicas publicó una selección de los materiales del libro, Juegos infantiles de Extremadura quedó inédito a la muerte del autor. Ahora, la Editora Regional de Extremadura publica la versión completa del trabajo precedido de un amplio estudio introductorio sobre al autor y la obra. “El conjunto que se presenta ante el lector reproduce la colección completa de los Juegos infantiles de Extremadura recogidos por Marciano Curiel Merchán (1892-1947) en diferentes localidades extremeñas a lo largo de tres décadas de búsqueda intensa. La edición toma como base el manuscrito custodiado por la familia del maestro y firmado en Trujillo en el año 1945” [Texto de contraportada]
    Reproducimos uno de los juegos recogido en Madroñera (Cáceres)

A LA UNA NACÍ YO
Salto. Niños. Primavera

A la una nací yo,
a las dos me bautizaron,
a las tres me confirmaron,
a las cuatro me eché novia,
a las cinco entré en quintas,
a las seis fui soldado, 
a las siete me casaron,
a las ocho me mataron,
a las nueve me enterraron,
a las diez espolique inglés,
y echar a correr.

Pellizcan al burro y salen corriendo” [p. 129]

lunes, 5 de noviembre de 2012

El encanto del agua sucia






EL ENCANTO DEL AGUA SUCIA

José Joaquín Sánchez
Málaga, Ed. Seleer, 2012, 56 págs.

El pasado viernes presentamos en la Casa de Cultura de Don Benito El encanto del agua sucia de José Joaquín Sachez (Campillo de Llerena, 1970), volumen que recoge dos obras de distinta naturaleza. Por una parte, un poemario titulado Huida a Madre, en el que el autor “vuelve a sus orígenes rurales hastiado del ambiente urbano e incapaz de una socialización mínima”. Por otra, un relato titulado El espejo que el propio escritor califica como “gore” y que contiene una violenta fabulación sobre la doblegación de la mujer. Reproducimos uno de los textos del poemario.

MEDIEVO

Miel, licor de gloria,
(grita un trapo negro, sentado
sobre el mimbre amarillo).

Nueces, huevos de campo,
y lo grita con desgana
como deshaciéndose
en su inventario antiguo.

Sombreros, sogas de pita,
y su voz se va apagando
para remontarse
en el licor de gloria.

Y tuve que comprarle
para llevarme conmigo
el privilegio de hablar
con una foto antigua.

Tres novelas











TRES NOVELAS


Nacido de Campillo de Llerena en 1970, Francisco Javier Sachez García es autor de tres novelas galardonadas con otros tantos premios: Tratado geográfico sobre la aversión ((III premio de Novela Corta “Villanueva del Pardillo” de 2006), El engendrador (premio 2008 Cersa-Ateneo de la Universidad de León), y Árboles de carne (IX premio de Investigación Literaria convocado por CEDER-La Serena en 2009). En ellas domina el recuerdo constante de la niñez en un entorno rural tan hermoso como cruel. Reproducimos un pasaje de su primera novela

“Su amigo Elías sufría un trastorno de la visión llamado acromatopsia y por ello no podía distinguir los colores que le rodeaban. Nadie sabía ese secreto que ambos compartían en el corral de la casa o en los descampados someros de la aldea hasta que comenzaron a ir al colegio del pueblo, en el que se descubren sin remedio todos los secretos de los niños y todas las avaricias de sus padres. Por eso, Evelio Cruz Meneses aprendió muy rápido los colores fundamentales y los bautizó con nombres nuevos para así explicárselos a su amigo.
-Hay cuatro colores importantes que necesitas conocer, Elías –argumentaba el niño Evelio a los ocho años de edad-. Los nombres de los colores son: retama, sangre, nieve y cieno. El resto ya lo iremos aprendiendo poco a poco.
-¿Y cómo es el color retama?
-Pues retama es el color de las hojas de los alcornoques y el color de las baldosas de mi casa y el color de los ojos de la maestra” [pp. 12-13]