TRÍO IRLANDÉS
Mérida, Editora Regional de Extremadura, Col.
Geografías, 2020, 187 págs.
Ahora la
Editora Regional de Extremadura publica Trío irlandés construida sobre una idea
sencilla, similar a la de una las muchas obras citadas en el texto, Tres hombres en un bote (1889) del
novelista inglés Jerome K. Jerome. También aquí nos encontramos con un viaje,
no por el Támesis, sino por Irlanda, con Dublín en el arranque y el cierre del
trayecto. Tres profesores universitarios deciden viajar a Irlanda y trazar un
recorrido circular (o semicircular) por varias ciudades y lugares de interés de
la isla asociados a escritores irlandeses: Joyce y Keats, de Dublín, o Franz
McCourt, de Limerick (el autor de Las
cenizas de Ángela y El profesor),
pero también por las carreteras sinuosas, los paisajes verdes bajo la lluvia,
los acantilados, el Oratorio de Gallarus (una iglesia paleocristiana) y la
torre Martelo (en cuya plataforma arranca el Ulises) y en cada aldea, los pubs con todas la variedades de
cerveza irlandesa en torno a las cuales estos tres amigos, profesores
universitarios, entablan conversaciones interminables sobre literatura,
historia y filosofía. Narrada en primera persona por uno de ellos, el escritor extremeño
Fernández (tres coincidencias entre narrador y autor), marcado por un ruptura
amorosa y por las malas críticas a su reciente novela, vamos conociendo las
personalidades, muy contrastadas, del filósofo castellano célibe, entusiasta de
Wittgenstein, del vasco arrepentido tras cada infidelidad a su esposa, o la del
narrador conturbado aún por emociones desoladas. El tono humorístico con el que
se narran las pocas peripecias del viaje se carga con citas, constantes referencias
culturales e intertextuales (procedimiento que recuerda al utilizado por Joyce
en el Ulises), comentarios irónicos o
sarcásticos sobre sus respectivas situaciones vitales, diálogos ebrios pero
ingeniosos y muchas carcajadas “de muchas clases, tenebrosas como un caravaggio, festivas como un mozart, melancólicas como un palladio, armónicas como un donatello”. Pero todo ello (el viaje, la
diversión, el humor, la amistad…) no consigue eludir para el narrador, como
confirma el desenlace de la novela, el dolor de la ruptura, el rostro bronco
del desamor y el presagio de una soledad futura.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuchas gracias, Manuel, por tu reseña.
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