domingo, 30 de octubre de 2022

La academia de Noviciado

LA ACADEMIA DE NOVICIADO

Juan Jesús Parralejo

Córdoba, Ed. Almuzara, 2022, 330 págs.

    Juan Jesús Parralejo (Navalvillar de Pela, 1961) es autor de dos libros de ensayo: Economía para leer el periódico (2014) y De Individual a Personalizado (2018). Ha publicado numerosos artículos en los diarios regionales HOY y El Periódico Extremadura. Licenciado en Económicas y Empresariales por la Universidad Autónoma de Madrid, pertenece al Cuerpo de Titulados Superiores de la Junta de Extremadura, Jefe de Servicio en diferentes áreas económicas (Fondos Europeos, Estudios y Análisis, Mercados y Competencia). Por un periodo de tres años trabajó como Experto Nacional en la Comisión Europea, en Bruselas. Ahora la editorial cordobesa Almuzara publica su primera obra de ficción, una singular y ambiciosa novela ambientada en el Madrid de los ochenta en que un estallido de vitalidad juvenil y creatividad surgida a espaldas de la cultura oficial cambia por completo el panorama cultural que atrae tanto a creadores originales como a intrusos y farsantes (“caras nuevas y nuevos caras, famosetes de la farándula y locutores locos, repintados carrozas y productores marginales, galeristas de garaje y semisótano, pintores eclécticos de gran formato y dibujantes de viñetas abirragadas”). Con una prosa rica, precisa y “barroca”, la obra organiza su trama en torno a tres itinerarios vitales, muy contrastados, cada uno de los cuales irrumpe en la narración con una constelación de personajes secundarios, todos jóvenes, cuando estos se sintieron “libres como nunca antes, y quizá después”. Reproducimos un fragmento descriptivo del ambiente de uno de los locales de moda.

    “Últimos aullidos. Vuelven a sonar canciones de culto de La Edad de Oro. Desmadre dionisíaco de los congregados en decibelios. Criaturas que viven en los pliegues de la noche, al calor del neón; buscan aventura, la aventura, su aventura: el viaje a la tierra de nunca jamás, a no se sabe dónde, a ninguna parte, el viaje por el viaje, pinchado, esnifado, inhalado, hasta que se deshagan las alas, en caída libre. Nunca el sueño de tantos desposeídos de ilusiones llegó tan alto, tan lejos, tan más allá del horizonte predestinado. Un salto de gatopardo salva el abismo que los separa de sus padres, que no fueron hippies, ni levantaron adoquines para encontrar la playa, obedientes hasta en la cama, rendidos a la mitra y el tricornio. No quieren ser como ellos, se niegan a pagar por la herencia, desafían el destino de cuna: sin gravedad en las costumbres, el desplante por el todo, ligero e histriónico, frívolo y golfo, con olor a desodorante. Temerosos de volver a casa, huyen de los viejos demonios familiares... We can be heroes/Just for one day...” [p. 113].

 

viernes, 28 de octubre de 2022

Hombre solo

HOMBRE SOLO

Eduardo Moga

Madrid, Huerga y Fierro Editores, Col. Rayo Azul. Poesía, 2022, 124 págs.

    Licenciado en Derecho y licenciado y doctor en Filología Hispánica por la Universidad de Barcelona, Eduardo Moga (Barcelona, 1962), es autor, como poeta (ha cultivado también géneros como el ensayo literario, la crítica o el libro de viajes) de los poemarios Ángel mortal (1994), La luz oída («Premio Adonáis», 1996), El barro en la mirada (1998), Unánime fuego (1999; 2ª edición, 2007), El corazón, la nada (1999), La montaña hendida (2002), Las horas y los labios (2003), Soliloquio para dos (2006), Los haikús del tren (2007), Cuerpo sin mí (2007), Seis sextinas soeces (2008), Bajo la piel, los días (2010), El desierto verde (2011; 2ª edición, 2012), Insumisión (premio al mejor poemario del año de la revista Quimera, 2013; Latino Book Award, EE. UU., 2014), Décimas de fiebre (2014) y Dices (2014). Este mismo año aparece una selección de sus textos en Amargord Ediciones, con prólogo de Jordi Doce, El corazón, la nada (Antología poética 1994-2014). Más tarde, la editorial madrileña Vaso Roto publica Muerte y amapolas en Alexandra Avenue  (2017) y ese mismo año la editorial Libros de Aldarán publica Lo profundo es la piel, una antología de poesía erótica al cuidado del poeta y ensayista Christian T. Arjona. En 2021 apareció Tú no morirás (Ed. Pre-Textos). Ahora, Huerga y Fierro Editores publica Hombre solo, un conjunto de poemas (y una composición final en prosa) de largo aliento y metros amplios y una expresión barroca, recargada, atenta todos los matices, complacida en su riqueza y complejidad léxica. Los textos versan sobre experiencias dramáticas vividas que enfrentan al sujeto lírico a la soledad tras la ruptura sentimental, la muerte de la madre y la enfermedad, a la conciencia de la fragilidad humana y a la incertidumbre de un futuro inquietante. Reproducimos un fragmento de una de las composiciones del bloque titulado “Poemas matrimoniales y otras perturbaciones”.

 TRÍPTICO CONYUGAL

 II

Tampoco me quedo ya en mi lado de la cama.

Ese era otro anillo. Y la cama, otro dedo

en el que compruebo una ausencia.

Esa ausencia es, ahora, una presencia absoluta,

contenida en los márgenes inabarcables

del colchón y la noche.

                            Ya no me quedo en la mitad que me correspondía.

Ahora que he dejado atrás la mitad del camino,

ruedo hasta la frontera nunca visitada

y enseño el fatigado pasaporte

del individuo que soy, con la cara descolorida

y cada vez menos erecciones,

con el pijama sudado y los ojos negros

                                                        de noche.

Pero he cruzado el confín espinoso

de la desaparición. Ese hueco ya no está habitado.

En ese hueco ya no hay cuerpo —ya no hay tiempo—,

sino un agujero desollado, un hoyo

en la que me aventuro tristemente a respirar.

Aunque yo tampoco estoy; aunque lo ocupe,

he alzado el vuelo

                            sin abandonar las sábanas.

Lleno el hueco vaciándolo de su oquedad,

entregando mi materia a su nada,

revolcándome en su nada recluida,

en su heredad herida,

envolviéndome en su piel, como en la piel

sanguinolenta de un despellejado.

                                               Ahí radico:

en lo que no es.

                            Lo he hecho mío: invadiéndolo,

deshabitándolo. Y sumo mis huesos fantasmales

a sus huesos fugitivos;

me vuelvo yo también hueso ido,

pero que pesa,

que se derrama en una soledad king size.

Vivir es amputar y ser amputado.

Morir, reparar una amputación con otra,

absoluta.

 

jueves, 27 de octubre de 2022

martes, 11 de octubre de 2022

Doce geranios en un balcón

DOCE GERANIOS EN UN BALCÓN

António Trinidad

Mérida, Editora Regional de Extremadura, Col. Vincapervinca, 2022, 321 págs.

    António Trinidad es Doctor en Filosofía y Letras (Universidad de Extremadura, España/Universidade do Porto, Portugal) y Máster en Estudios Ibéricos e Iberoamericanos (Universidad de Lovaina, Bélgica). Es autor del estudio Historia de la pintura portuguesa 1800-1940 (2005) y de la novela Tierra raya (2010). Director del documental Españoles en Casablanca (2007), ejerce como co-editor de la revista literaria trilingüe Manga Ancha. Como docente y experto en educación ha trabajado en España, Marruecos, Bélgica y Colombia. Actualmente es profesor en Francia. Ahora la Editora Regional de Extremadura publica su segunda novela, Doce geranios en un balcón, cuya trama arranca con la arbitraria expulsión del protagonista-narrador de la Escuela Europea en Bruselas. Por sugerencia de su sicóloga, comienza a llevar un diario que va derivando a la condición de unas memorias cuando rememore sus años adolescentes y juveniles en la ciudad de Cáceres. Será aquí donde se fragüe una personalidad conflictiva en una relación con amigos repleta de gratificaciones pero también de quiebros enigmáticos y acechanzas. Reproducimos un fragmento reflexivo sobre la adolescencia en el entorno escolar con unas lúcidas consideraciones comunicadas con una prosa rigurosa y precisa. 

   “Llegué a varias conclusiones: si trabajo con sentido común y evito en lo posible los recursos de la amenaza y de la culpa, contribuyo al silencio de  la Escuela; si un problema se resuelve sin que se note mi presencia es que lo he hecho bien; el jolgorio de los patios durante los periodos de recreo es un síntoma de la buena salud de una escuela, el silencio de los pasillos durante las horas de también; cuando una cara triste se transforma en algo ha merecido la pena; la función del consejero es evitar sinsabores, lo otro es burocracia; si un niño hace ruido algo le duele; sentado detrás de la mesa, estoy escondido, si quiero que me cuenten, tienen que verme; si un adolescente miente, hay una verdad que le daña; cuando un niño se apropia de lo que no es suyo, no quiere que lo juzguen, quiere que lo quieran; si en esta escuela hay un problema, es porque en esta escuela hay una solución.

  Honestamente estoy satisfecho con mi labor en la Escuela Europea aunque ahora esté fuera de ella. Creo que ha sido trabajo más estimulante que fácil. La adolescencia es una fase complicada, los chavales se lanzan a la aventura del afecto y se dan de bruces con el sufrimiento. He visto a algunos llorar de miedo porque no le veían los límites al desengaño. No quiero decir con esto que con la edad el dolor se atenúe, solo que deja de sorprender, duele igual, pero espanta menos. Quizá por eso pocas cosas me satisfacen más que el agradecimiento de los adolescentes. Ahoya ya no trabajo en la Escuela, no trabajo, estoy en el paro” [pp. 52-53].

 

martes, 4 de octubre de 2022

Poesía completa

POESÍA COMPLETA

César Martín Ortiz

Mérida, Editora Regional de Extremadura, Col. Poesía, 2022, 661 págs.

Edición, introducción y notas de José Luis Bernal Salgado

    José Luis Bernal Salgado (Cáceres, 1959) es Catedrático de Literatura Española del Departamento de Filología Hispánica de la Universidad de Extremadura. Poeta, crítico e investigador, cuenta con una extensa producción centrada en la literatura española contemporánea y, en especial, en temas y autores relacionados con la vanguardia histórica y con el Veintisiete, donde destaca su atención a la figura de Gerardo Diego. Ahora la Editora Regional de Extremadura publica a su cuidado la poesía completa de César Martín Ortiz (Salamanca, 1958 - Jaraíz de la Vera, 2010), un notable poeta y narrador que mantuvo una estrecha relación con Extremadura como profesor de lengua y literatura en Jaraíz de la Vera. En nuestra región vieron la luz obras como Un poco de orden (1997, I.C. El Brocense, premio de cuentos Ciudad de Coria), Nuestro pequeño mundo (Editora Regional de Extremadura, 2000), Paso de contarlo (Plasencia, A. Alcancía, 2004). Otras narraciones, todas póstumas, han sido Cien centavos (2015), Necrosfera (2018), De corazones y cerebros (2019) o A sus negras entrañas (2021). En vida publicó los libros de poemas Dedicatoria o despedida (premio Leonor de la Diputación provincial de Soria, 1990) y Toques de tránsito (accésit del premio Esquío de poesía, 1995). En la introducción a esta edición de su poesía publicada e inédita (“César Martín Ortiz, El escriba del viento”), que podemos considerar definitiva, José Luis Bernal recuerda el carácter singular de su itinerario poético: “la poesía completa de César Martín Ortiz que ofrecemos reúne, tras sus dos únicos libros publicados —Dedicatoria o despedida, libro que gana el Premio Leonor de Soria en 1989 y se publica en 1990; y Toques de tránsito, accésit del XIV Premio Esquío de Poesía, publicado en 1995—, una serie de libros inéditos, cuyo tiempo de escritura se entrevera, en algunos de ellos, con los dos citados y llega, en el caso de otros, hasta el final de la vida del poeta. De manera que, con independencia de que nuestro autor no publicara, tras el accésit del premio Esquío, ningún otro libro de versos, su escritura poética no se interrumpió, antes bien continuó sin pausa junto a su creación narrativa, que sí vio la luz, aunque en contadas y esforzadas ocasiones, como hemos comentado. La condición natural de narrador y poeta en César Martín Ortiz, como expresiones creativas conectadas y llenas de interferencias mutuas, es innegable”. [p. 17]. Reproducimos uno de los poemas de un libro inédito, La pena y la nada, en que el regreso de la mujer a la ciudad, la aproximación física al lugar en que habita el poeta contrasta con el distanciamiento definitivo entre ambos.

 XXIII

Ha vuelto a la ciudad.

Salió el sol a las dos, pero más tarde

se cerró un duro cielo de grafito

sobre las avenidas, alarmando

la litúrgica calma del domingo.

Los paraguas abrieron sus corolas

de flores enlutadas y mal gusto,

y de repente pareció que estabas

en otro día lejano y no en aquel.

Visitaste el cimiento de unas casas

que están edificando en las afueras.

Volviste a casa. Durante la comida

en tu balcón dejaba un cielo avaro

la leve calderilla del granizo.

Ha regresado.

Ella está en la ciudad

como en otro país o en otro siglo;

como si hubiera muerto

o como si el cadáver

—tal vez sea más exacto— fueses tú.