miércoles, 26 de febrero de 2025

Reversibles

REVERSIBLES

Victoria Pelayo Rapado

Valladolid, Castilla Ediciones, 2024, 141 págs. 

Victoria Pelayo Rapado (Zamora, 1960) es Graduada en Derecho y escritora que cuenta con diversas publicaciones como Malos días, (2018, De la luna libros, Finalista XVI edición del premio Setenil); Lo Justo, (2021, Baile del Sol); Orden, (2023, Editora Regional de Extremadura). Ha recibido los premios Ciudad de la Laguna, 1986, por Una amistad corriente. Y el Manuel O. Rodríguez López, 2016, con el relato "Preparativos". Ha colaborado en revistas: Versión Original; EÑE; La bolsa de pipas; En sentido figurado; Y en la antología de relatos Contamos todas. 29 narradoras de cuento de Castilla y León (Castilla ediciones); Además es colaboradora habitual en el diario Hoy de Extremadura desde el año 2020. Reversibles reúne ocho relatos de contornos realistas (episodios verosímiles, personajes que parecen tomados del natural…, “todo lo que sucede en Reversibles ya ha pasado alguna vez a alguien” ) que con una notable eficiencia estilística (precisión, riqueza léxica) reflejan un presente complejo y convulso en tramas que poseen un propósito testimonial en que los personajes individuales comparecen también en el relato como representantes de grupos sociales amplios (como la joven violada de “De repente, Musa” que denuncia la brutal violencia masculina o el morador de “El otro Mediterráneo”, asediado por un mar creciente que, debido al cambio climático provocado por el hombre, debe abandonar su vivienda situada junto a la playa). Otros relatos contienen tramas éticas, íntimas o sentimentales como el boxeador sonado de “En la basura” que conserva en su nuevo mundo de derrotado su integridad moral, o las distintas parejas de varios relatos, unidos por relaciones superficiales (todos, al fin, como se titula uno de los relatos, “vecinos temporales”): jóvenes amantes cuya relación se malogra cuando deciden vivir juntos, la mujer casada decidida a abandonar a su marido imitando así la separación de unos amigos…, todos ellos, hombres y mujeres “reversibles”, esto, es volubles, tornadizos, marcados por la insatisfacción pero sin querer resignarse a esa “infelicidad normal” que parece aquejar a todos, con unos desenlaces narrativos verosímiles pero sorprendentes. Reproducimos un fragmento de “El otro Mediterráneo”.

“Antes de abandonar el piso lo recorrió por última vez, entró en cada habitación, tocó las paredes, se sentó en su cama y en la de invitados; se ajustó al hueco del sofá marcado por su cuerpo durante tantos años, ¡cuántas películas había visto allí sentado!; acarició los muebles, los objetos que no podría llevar consigo y que en unos días o semanas queda-rían a merced del agua. Tenía ganas de llorar otra vez. Abrió los armarios, tocó su ropa, la que había decidido abandonar, palpó los pantalones, las americanas que hacía años que no usaba, metió la mano en el hueco de los zapatos, pronto se llenarían de agua, repasó los libros, los que se convertirían en comida para peces, acarició sus lomos, los adorados títulos, sólo se llevaba unos pocos, los que cabían en una caja. En la cocina abrió las puertas de cada armario, allí se quedaban la cristalería que se trajo de casa de sus padres, el juego de cuchillos, los cubiertos de diario, cazuelas, sartenes, electro-domésticos, libros de recetas, allí se quedaba lo que había formado parte de su vida; ahora tocaba empezar otra. La idea de que todos aquellos ajuares, incluidos los suyos, los de sus vecinos y los de todos los edificios de la ciudad, supondrían una contaminación sin precedentes cuando se hundieran en el mar le distrajo por unos segundos. Y qué me importa la contaminación del mar, maldito e mar, que se hubiera quedado en sus límites, pensó”” [pp. 121-122]. 

 

sábado, 22 de febrero de 2025

Obra poética

OBRA POÉTICA

Manuel Gómez Sánchez

Mérida, Editora Regional de Extremadura, col. Rescate, 2024, 595 págs.

Edición, introducción y notas de Pilar Montero Curiel y María Luisa Montero Curiel

Prólogo de José Manuel Blázquez Gómez

Pilar Montero Curiel es profesora titular en la Facultad de Filosofía y Letras de la UEX. Comenzó su carrera docente e investigadora en el Departamento de Filología Hispánica y Lingüística General de de la UEX, donde defendió su tesis doctoral sobre El habla de Madroñera (Cáceres), en 1993. Sus principales líneas de investigación son la historia de la lengua española, la variación lingüística, la lexicografía y lexicología españolas, a las que se adscriben algunos de los trabajos publicados a lo largo de su carrera: Vocabulario de Madroñera (Cáceres), 1995; El habla de Madroñera (Cáceres), 1997; El extremeño (2006); En la prehistoria de los estudios sobre el español coloquial. Frases y diálogos de la vida diaria, de Werner Beinhauer (2012)

María Luisa Montero Curiel es profesora titular en la Facultad de Filosofía y Letras de la UEX. Se doctoró en 1996, con la tesis Sobre la prefijación negativa en español. Sus principales líneas de investigación son la Gramática Española (morfología -y fonética, principalmente), la lengua literaria y el Español como Lengua Extranjera, sobre las que tiene numerosas ponencias, comunicaciones y publicaciones de ámbito nacional e internacional. La prefijación negativa en español (1999) y Prefijos aminorativos en español (2001) son dos de sus obras más destacadas.

Pilar y María Luisa Montero Curiel han escrito conjuntamente algunos trabajos, entre los que destacan El léxico animal del Cancionero de Banea (2006) y las ediciones de las obras de Marciano Curiel Merchán, Cuentos extremeños (2006 y 2020), Juegos infantiles de Extremadura (2012) y Fiestas extremeñas (2016).

Ahora la Editora Regional de Extremadura publica en su colección Rescate la Obra poética de Manuel Gómez Sánchez al cuidado Pilar Montero Curiel y María Luisa Montero Curiel. Nacido en Madroñera en 1900, Gómez Sánchez, excepto una breve estancia en Madrid, reside en su localidad natal, en Conquista de la Sierra y en Trujillo hasta su temprana muerte (fue fusilado por los sublevados), en unos años en los que el desfase de la región, periférica y mal comunicada, de los  movimientos literarios nacionales es muy marcado. Salvo una obrita publicada en vida (Juan el Pastor. Poema sencillo en tres cantos, Truillo, 1926), su obra, aparecida en periódicos locales, se compone de unos doscientas composiciones escritas en extremeño y, en su mayoría, en castellano, y en ellas convergen tonos neorromáticos y modernistas con la huella de la poesía regionalista de Chamizo y Gabriel y Galán. Con un marcado acento biográfico, los poemas reflejan “sus experiencias vitales, sus credos, su ideario político, social y religioso, siempre a través de un abanico amplísimo de temas que hablan del amor, la amistad, el dolor, el desengaño, la belleza femenina, la muerte, el paisaje, la naturaleza,  la vida de los pastores y campesinos” [Introducción, p. 75]. Reproducimos una de las composiciones titulada “En el cementerio”.

 

Noche de difuntos; doblan las campanas:

doblan las campanas con tristes sonidos,

que añoran recuerdos de cosas lejanas,

de tiempos pasados, de seres queridos…

 

En el cementerio las almas cristianas

velando las tumbas de los seres idos

rezan oraciones fervientes y humanas

a la vez que exhalan dolientes gemidos.

 

También el poeta se postra doliente

y un canto a los suyos eleva ferviente

en la tierra virgen de este Camposanto;

 

y en tanto recuerda puesto de rodillas

sus queridos muertos pueblan sus mejillas

fervorosas lágrimas de cristiano llanto…

 

jueves, 20 de febrero de 2025

El cuaderno de hule negro


 

EL CUADERNO DE HULE NEGRO

(Relatos)

Fernando Tomás Pérez González

Mérida, Editora Regional de Extremadura, col. Rescate, 2024, 201 págs.

Edición, introducción y notas de Fernando Pérez Fernández 

   Fernando Pérez Gonzalez (1984), editor del presente libro e hijo del autor, es profesor de filosofía y poeta con una obra recogida en varias antologías como Piedra de toque. 15 poetas emergentes en Extremadura (ERE, 2017) y Diáspora. Poetas extremeños en el exilio (Ediciones Liliputienses, 2020). Ahora la Editora Regional de Extremadura, dirigida con notable eficiencia por Fernando Tomás desde 1995 hasta su fallecimiento prematuro en 2005, publica este compendio de narraciones que su autor dejó inéditas. En el estudio introductorio Fernando Pérez traza una pormenorizada biografía paterna, emocionada, pero perfectamente documentada y ecuánime en sus juicios, deteniéndose en los años de formación, humana y académica (doctor en Filosofía), su tarea docente en varios institutos de la región y su labor como editor al frente de una empresa pública que agrandó bajo su dirección el perfil de buque insignia de la edición en Extremadura. En vida publicó, entre otras obras, La introducción del darwinismo en la Extremadura decimonónica (1987) y, junto con Diego Núñez, Genealogía extremeña de Antonio Machado. Estudios sobre José Álvarez Guerra (1989) , además de numerosísimos trabajos en diarios y revistas especializadas. Tras su muerte, vio la luz Artículos y ensayos (2013). Un segundo bloque de la introducción analiza las narraciones incluidas, de variada temática pero con un marcado sesgo biográfico (recuerdos de la niñez, evocaciones del mundo rural, oficios y tipos campesinos…, que en ocasiones (“Un suceso en la Mina”, “Labrarás la tierra”…) se acercan a perfil de la novela corta, con un estilo “cervantino” de frases amplias, un notable rigor léxico y una marcada capacidad de observación. Reproducimos un fragmento de uno de los pocos textos no inéditos (Gacetilla de la U.B.Ex., 1994) titulado “Últimas lecturas” que contiene un emocionado recuerdo de su padre (Fernando Pérez Marqués, escritor como él).  

“En las infinitas de este universo inagotable me he reencontrado luego, una y mil veces, con el hombre que me enseñó a leer. Le debo también esa extraña complicidad que crean los libros, hermosas tardes con él compartidas, en animada charla o en exploración minuciosa de polvorientas librerías de viejo. Los últimos días que pasé a su lado transcurrieron entre los pupitres de la Biblioteca Nacional y las casetas de la Cuesta de Claudio Moyano. Cuando era ya dolorosamente consciente de peligro que ser cernía sobre él, hube de recordar más de una vez aquella anécdota que tantas veces le oí referir con un ligero tono de melancolía: "Cuentan de Menéndez Pelayo que, estando ya próximo el final de sus días, exclamó: ¡Qué pena morir cuando aún me faltan tantos libros por leer!". Esta tarde de verano incierto, he vuelto a la casa de mi padre para buscar entre sus libros esa tenue presencia que se resiste a abandonar los objetos que fueron muy queridos. Sobre su mesa de trabajo le aguardan aún, en espera solícita, sus últimas lecturas. Tomé al azar uno de sus libros: las poesías de Machado. Y entonces, a través de los versos de este poeta de común veneración, pude escuchar el eco inextinguible de su voz diciéndonos:

Hacedme

un duelo de labores y esperanzas.

Sed buenos y no más, sed lo que he sido

entre vosotros: alma.

Vivid, la vida sigue,

los muertos mueren y las sombras

pasan;

lleva quien deja y vive el que ha vivido.

 Comprendí, así, que nadie se pierde en el abismo sin rostro de la muerte si ha enseñado a su hijo a leer en los libros la huella perenne de sus enseñanzas”.  [pp. 189-190].

lunes, 17 de febrero de 2025

Palabras


   Acaba de ver la luz este librito publicado con la habitual pulcritud por la Editora Regional de Extremadura en su colección Vinvapervinca. Mi agradecimiento al anterior director de la Editorial, Luis Sáez Delgado, que aprobó el proyecto, al actual, Antonio Girol, y a María José Hernández, al frente de la que sigue siendo el buque insignia de la edición en Extremadura. Reproduzco el texto de contraportada

   El presente volumen reúne doce composiciones fronterizas entre la narración y el ensayo que, con un marcado sesgo biográfico, trazan un recorrido vital que arranca en un entorno rural de la niñez para detenerse en ciertos momentos específicos (los ambientes universitarios, el servicio militar, un verano en París, el bullicioso ámbito de las aulas, encuentros con escritores, un viaje a Colombia, el estudio de la trayectoria de un poeta olvidado…) para regresar, al final de este viaje circular, al mismo territorio rayano de la niñez. Impulsado por un ejercicio de una memoria ya sedimentada, y contemplado este itinerario sin efusiones ni nostalgias, los textos tienen como motivo recurrente esas palabras, mágicas y malditas, que dan título al libro.

 

 

sábado, 15 de febrero de 2025

Lecturas al poniente

LECTURAS A  PONIENTE

Poesía en Extremadura, 2005-2023)

Álvaro Valverde

Mérida, Editora Regional de Extremadura, col. Perspectivas, 2024, 451 págs

In limine del autor

Nacido en Plasencia en 1959, Álvaro Valverde ha publicado, entre otros, los libros de poesía Las aguas detenidas, Una oculta razón (Premio Loewe), A debida distancia, Plasencias, Ensayando círculos, Mecánica terrestre, Desde fuera, Más allá, Tánger, El cuarto del siroco (Premio Meléndez Valdés de la crítica) y Sobre el azar del mapa. Es autor de dos novelas: Las murallas del mundo (Premio Extremadura a la Creación) y Alguien que no existe, un libro de artículos (El lector invisible), uno de viajes (Lejos de aquí) y otro de diarios (Porque olvido. Diario 2015-2019). También de Extremamour, en colaboración con el fotógrafo suizo Patrice Schreyer. Sus poemas figuran en las antologías Un centro fugitivo (con selección y prólogo de Jordi Doce, con quien codirige la colección Voces sin tiempo de la Fundación Ortega Muñoz), Álvaro Valverde. Antología poética (1985-2015) con ilustraciones de Esteban Navarro y Meditaciones del lugar (con selección y prólogo de José Muñoz Millanés). En la actualidad, es crítico de poesía de El Cultural y colabora con asiduidad en otras revistas literarias. Desde 2005, edita un blog en la dirección: http://mayora.blogspot.com.es/  Su web: www.alvarovalverde.es 

Lecturas al poniente, que ahora publica la Editora Regional de Extremadura en su colección “Perspectivas”, es un amplio volumen que agrupa las composiciones en tres bloques, “Los libros” (el más numeroso), “Las antologías” y “Otros textos”, aparecidos  muchos de ellos en su blog (Solvitur ambulando) y recogidos, otros, de revistas como Cuadernos hispanoamericanos, Turia, Suroeste, Nayagua, El Espejo, Quimera, El Cuaderno, suplementos como El Cultural, y periódicos como el diario Hoy. El conjunto reúne cerca ciento cincuenta reseñas de obras de sesenta y cuatro autores (extremeños o relacionados con la región), el análisis de varias antologías (Piedra de toque, Diáspora, Abierto al aire, Literatura en Extremadura…) y textos de contenido variados (evocaciones de Ángel Campos Pámpano, el profesor Rozas, las proclamas del “manifiesto palmario” del Congreso de Escritores extremeños de 1982, los premios…). Además de la oportunidad y del valor actual de esta recopilación de textos críticos, es seguro que su aportación crecerá con el paso de los años cuando llegue el momento de elaborar visiones de conjunto sobre la creación poética de este periodo. Comunicados con un tono conversacional, rehuyendo la jerga académica y las valoraciones hiperbólicas de la crítica periodística al uso, los textos de Valverde nacen de una lectura atenta y ponderada de unos libros muy variados que responden a talantes poéticos diversos, lejos del tono de esos críticos que, atrincherados tras una poética determinada, disparan contra todas las demás, de modo que muy bien puede recordar en un texto liminar las palabras de George Steiner: “Soy un crítico positivo: escribir sobre un libro significa también saldar una deuda de gratitud”. Reproducimos un fragmento de la composición titulada “Premios, premios, premios”.

“Mi defensa de los premios se basa, antes que nada, en las posibilidades que proporciona a los autores que empiezan, a los jóvenes. Nuestro paisano, el otrora temible crítico José Luis García Martín, escribía hace un par de semanas en ABC de las Ates y de las Letras: ‘Los premios de poesía suelen estar gafados: quien después de los cuarenta sigue concursando ya no juega en la misma división que Valente o Brines, sino en la de los muy respetables Ángel García López o Carlos Murciano’.

Esta tajante afirmación admite matices, por supuesto. Así, no es lo mismo quien después de esa edad aspira a seguir publicando los libros que escribe y lo hace a través de un premio porque, pongo por caso, no encuentra editor, que quien, por afición, vicio o enfermedad (que uno ya no sabe) se sigue presentado a todo galardón que se convoca con un afán bien distinto. El objetivo no es tanto publicar una nueva obra (en rigor no la hay: a determinado ritmo, la reiteración es inevitable), cuanto seguir ganando dinero a costa de esta curiosa lotería. Pero este modo, además de perjudicarse a sí mismo como escritor (hay quien ha tirado por la borda su prestigio literario a este bajo precio), daña a los que buscan abrirse camino en la literatura, que es, sin duda, un motivo más noble. Hay premios sucios y premios limpios. Los primeros están dados de antemano y los segundos, no. Visto lo visto, para desesperación de los miembros de los jurados, al menos para éste que escribe, los limpios, que son los que conozco, suelen ganarlos casi siempre ventajistas, auténticos cazapremios profesionales. Podría citar nombres” [pp. 421-422].

 

jueves, 13 de febrero de 2025

Seis días por la Tierra sin Pan


SEIS DÍAS POR LA TIERRA SIN PAN

Pablo García

Mérida, Editora Regional de Extremadura, Col. Viajeros y estables, 2024, 120 págs.

Pablo García Bengoechea es, además de paseante solitario y caminante vocacional, antropólogo de profesión. Podría definirse también como escritor pero le da vergüenza. Ya llegará el día, se dice a sí mismo para animarse. Su biografía no es una retahíla de datos, ni una hoja de servicios, sino una manera de entender la vida. Y esta le dice que, al igual que necesita cambiar de rumbo de cuando en cuando, cambia de ocupación es igualmente saludable. Por fortuna no se siente enraizado a ninguna parte y esto le ha dado algo de vagabundo errante. No obstante, ha pasado más tiempo en América Latina que en otros lugares, exceptuando el suyo de nacimiento , y ha sido allí, más que en la universidad, donde ha aprendido las cosas importantes de la vida. Entre ellas, como leyó alguna vez en alguna parte, que los caminantes solitarios son imprescindibles para el correcto funcionamiento del mundo.

   La Hurdes es la comarca extremeña que mayor atención ha atraído a escritores de dentro y fuera de la región. El primer libro de viajes, con una intención testimonial y de denuncia, fue Caminando por Las Hurdes, de Antonio Ferres y Armando López Salinas. También el que mayor eco tuvo dentro y fuera de España al ser traducido a varios idiomas y publicado en la revista Les temps modernes de Jean Paul Sartre con fotografías de Luis Buñuel (autor del documental Las Hurdes, tierra sin pan, rodado en 1932, al que se alude en el libro que comentamos). El mismo propósito de denuncia de una comarca abandonada a su suerte por el poder (que acabó designando por antonomasia a cualquier entorno empobrecido, como confirma el libro de Ramón Carnicer, Donde Las Hurdes se llaman Cabrera, una comarca de León), el libro de Víctor Chamorro, Las Hurdes, tierra sin tierra, en tanto Juan Antonio Pérez Mateos, tras ciertas inversiones en el entorno, da una visión más edulcorada en Las Hurdes, clamor de piedras.

Seis días por la tierra sin pan enlaza con esta tradición en un viaje que arranca en Azabal, alquería del ayuntamiento de Caminomorisco, en las Hurdes Bajas, hasta llegar a Horcajo, pasando por aldeas y caseríos (El Gasco, Riomalo de Abajo, Fragosa, Martinlandrán …), atravesando ríos (el Hurdano, el río de los Ángeles, el Malvellido…), subiendo y bajando por montes agrestes, conociendo a unos hurdanos envejecidos y acogedores que pueblan un entorno en que las lacras ya no son la falta de alimento o de atención médica, sino la despoblación, el exilio económico de los jóvenes, con lo que nos enfrentamos a una comarca que sigue condenada a su involución. Reproducimos un fragmento del día 5º.

“Llegando al cruce de Cerezal, ya muy cerca de Nuñomoral, el caminante se despide del panadero, se apea de la furgoneta y echa a andar, dejando el pueblo atrás. Sigue la carretera de El Gasco, que serpentea hacia arriba. Desde allí se divisa un camino pegado al río que corre por el fondo del valle. Le gustaría caminar a su vera pero teme que le lleve a donde no quiere ir. Por la carretera vuelve a ver colmenas. Ruega para que no se alboroten y le obliguen a tirarse al río. La escena del documental de Buñuel en la que cientos de abejas, sintiéndose amenazadas, salen de sus colmenas y matan a un pobre burro a picotazos le ha dejado sugestionado. Habiendo caminado un trecho, el río Malvellido empieza a formar meandros en una especie de desfiladero natural que se angosta gradualmente. Pronto arriba a Martilandrán, alquería de Nuñomoral. El bar que se ofrece a la entrada está cerrado. Unos hombres le informan que hay un chiringuito y un restaurante en Fragosa, un poco más adelante. En su parte alta, junto a la carretera, Martilandrán tiene casas bien enlucidas, recién pintadas y con cierta categoría. Cuando se interna, sin embargo, por sus calles bajas el panorama es distinto, como en otros tantos pueblos de la comarca. En una escueta intersección entre varias calles aparece un hombre sentado en una banca de piedra.

    -No está muy animado el pueblo –le dice el caminante a manera de saludo.

    -No señor. En esta parte baja solo vivo yo y mi familia. Los demás viven en la carretera”. [pp. 88-89].

Taller de escritura de Yolanda Regidor


 

miércoles, 1 de enero de 2025

Un rayo de sol

UN RAYO DE SOL

Pepa Pinar

Mérida, Editora Regional de Extremadura, Col. Escena Extremeña, 2024, 131 págs.

Edición bilingüe. Trad. al portugués de Luis Leal

Pepa Pinar (Extremadura 1970) es licenciada en Filología Hispánica y Graduada en Arte Dramático, en la especialidad de Dramaturgia y Dirección escénica Profesora de Lengua castellana y Literatura en el Instituto Enrique Díez-Canedo, tiene publicado el texto El extremeño de Tentudía por la Diputación de Badajoz en 2003. Ha participado con varios microrrelatos en la obra Breverías del Centro de Profesores y Recursos de Zafra en 2008. Su pieza teatral Lenguas mvertas fue publicada por la Federación de Asociaciones de Teatro en 2021 y en imprenta la obra Cuatro dramaturgias de textos clásicos para teatro joven por la editorial Algorfa. Ha investigado sobre “El teatro como herramienta pedagógica'', tema de su Trabajo de fin de Estudios de Arte Dramático, sobre el que ha coordinado cursos para docentes en el Centro de Profesores y Recursos de Mérida y ha impartido dos comunicaciones, una en la Real Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid dentro de las Jornadas de Pedagogía Teatral en 2016, con el título Declamando en el desierto, y otra para el Centro de la Música y las Artes Escénicas de Extremadura en Mérida en marzo de 2021. Desde 2007 dirige el grupo de teatro joven Molamanta para el que ha escrito textos con los que la agrupación ha obtenido dos premios en el certamen Guiones para la Ciencia organizado por la Universidad de Extremadura en 2015 y 2017 y cuatro Premios Buero de Teatro joven. Un rayo de sol obtuvo en 2019 el XI Premio a mejor texto teatral de autor extremeño convocado por FATEX.

Ahora la Editora Regional de Extremadura en su colección “Escena Extremeña”, Un rayo de sol, cuya trama se sitúa en un asilo de ancianos en donde Isabel ha ingresado a su hermana mayor, Teresa, enferma de Alzheimer. En medio de la vida cotidiana de los internos, aquejados por males físicos o mentales, de las mentiras piadosas de enfermeras y seres queridos, la neblina inhumana de la enfermedad es atravesada por el “rayo de sol” de un episodio trágico de su pasado cuyo dolor la ha marcado y la marcará hasta su muerte. Reproducimos un fragmento de la traducción al portugués que contiene una referencia a ese trauma del pasado.

 

ISABEL:

A Teresa cada dia fala menos. E o que ela gostava de falar e cantar.

FILHO:

É verdade. Antes estava sempre a cantar urna canção de quando era nova, uma dessas das festas populares.

ISABEL:

Sim, Um raio de sol. É que o seu marido era cantor numa orquestra e, quero dizer, eu também dava um ar da minha graça.

FILHO:

Dona Teresa, náo quer cantar? Un rayo de sol, oh, oh, oh...

TERESA:

ISABEL:

Nada, há muito que já náo canta. Deixou de cantar quando perdeu a filha, mas depois, guando começou a ficar com Alzheimer, deulhe para cantar as canções da orquestra a toda a hora.

FILHO:

Perdeu uma filha?

ISABEL:

(Faz sinal para se calar) A menina está na escola, nao é verdade, Teresa?

TERESA:

A menina não está na escola. A menina foi-se com o sangue e tu estavas  a beija-lo. Tu, tu, tu (Chora)

ISABEL:

(A acariciá-la) Calma, Teresa, calma. Nao há problema”. [pp. 116-117]