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jueves, 19 de enero de 2017

Carlos Medrano



DONDE PODER VOLVER

Carlos Medrano
Don Benito, Vberitas 2016, separata de Ventana Abierta, 2016, 27 págs.

   Bajo la dirección de Juan Ricardo Montaña, el colectivo Vberitas ha dedicado la separata central del último número de Ventana Abierta a Carlos Medrano (Salamanca, 1961), que residió en Don Benito durante su infancia y adolescencia. Hasta la fecha, Medrano ha publicado Corro (Badajoz, Diputación Provincial, 1987) y en esta misma editorial, en la colección Alcazaba, Las horas próximas (1989), finalista del premio “Ciudad de Badajoz”. Más tarde, en la colección La Centena de la Editora Regional de Extremadura aparecería A lo breve (1990) y en 1996, Imágenes encuentros (Valladolid, P.O.E.M.A.S.). En 2013 fue incluido en una antología publicada en Valladolid por la Fundación Jorge Guillén titulada Sentados o de pie, 9 poetas en su sitio (con prólogo de Antonio Piedra, director de la Fundación). Una nota final a Donde poder volver informa de que “el título de esta selección de poemas está tomado de esta nota, recogida en el blog isla de lápices, de donde proceden todos ellos: “Al escribir, también se indaga o se reconstruye la belleza -se retorna a una fuente-, y se activa un disfrute -donde poder volver- menos perecedero, más constante”. Reproducimos una de las composiciones que deja constancia de la proximidad afectiva del poeta a otros autores de la región (Ángel Campos, Álvaro Valverde, Santiago Castelo), unos “amigos de la que he considerado siempre mi tierra”.

CUATRO EMBLEMAS

Ángel Campos Pámpano

Cómo lámina el río a la luz de la tarde,
así el verso en el aire a salvo de la muerte.

Álvaro Valverde

También el sur te llama.
En la ciudad antigua
las calles son poemas
que escribes y recorres.

Santiago Castelo

En ti deseó el verano
saciar sus plenitudes
y el claro corazón buscó una fuente.

Carlos Medrano

Quise estar con vosotros.

Seguro de esos ojos,
esperé a que se abriesen.


martes, 24 de mayo de 2022

A Ángel Campos Pámpano

RECOBRADA MEMORIA

A Ángel Campos Pámpano

Carlos Medrano [Coord]

Don Benito, Vberitas, 2022, 101 págs.

Introducción (“La voz que permanece”) de Carlos Medrano

Ilustración de portada de Juan Ricardo Montaña

    Recobrada memoria, un proyecto del poeta Carlos Medrano, constituye un homenaje a uno de los personajes más sobresalientes (y más queridos) del panorama literario regional, Ángel Campos Pámpano (San Vicente de Alcántara, 1957 – Badajoz, 2008), poeta, traductor y dinamizador cultural de numerosos proyectos (a él se debe la creación de las aulas literarias en la región). “Pocas veces –considera el autor de la introducción- la ausencia de un escritor ha concitado a lo largo de todos estos años transcurridos entre quienes lo conocieron el recuerdo emotivo de su persona y de su poesía donde una limpia y reconocible dicción volvía permanente su mundo –desde el más íntimo al físico de los lugares que hizo suyos- con esa consistencia de lo leve que él aprendió del aire y de la luz para nombrarlo” y recuerda un texto de Francisco Javier Irazoki de Ciento noventa espejos (2017): “Es inhabitual pero sucede: una persona sintetiza en su comportamiento las mejores calidades de la sociedad y logra unir a los ciudadanos”. Los colaboradores han utilizado una de las formas cultivadas por el poeta sanvicenteño, tan propenso a las estructuras métricas breves y a la expresión concisa, el dístico. Sus nombres, ordenados cronológicamente, son Pureza Canelo, Pablo Guerrero, José Antonio Zambrano, José María Bermejo, Perfecto Cuadrado, Juan Ricardo Montaña, José Luis García Martín, Gonzalo Hidalgo Bayal, Jean Gabriel Cosculluela, Ezequías Blanco, Manuel Vicente González, Alfonso Alegre Heitzman, Santos Domínguez, Francisca Díaz Fernández, Fernando León, Luciano Feria, Tomás Sánchez Santiago, Basilio Sánchez, José Luis Bernal Salgado, Jesús García Calderón, Elías Moro, Álvaro Valverde, María Rosa Vicente, José María Lama, Carlos Medrano, Serafín Portillo, Juan Manuel Barrado, Miguel Ángel Lama, Javier Alcaíns, María José Flores, Ada Salas, Luis Sáez Delgado, Irene Sánchez Carrón, Diego Fernández Sosa, Javier Morales Ortiz Julián Quirós, Antonio Sáez Delgado, Suso Díaz, Antonio Reseco, Juan Ramón Santos, Mario Lourtau, José Manuel Díez, Julio César Galán, Luis Leal, Eva María Romero Rivero, Isabel Jimeno, Paula Campos Fernández, Carlos García Mera, Ángela Campos Fernández, Guadalupe Villarreal, Anónimo de Yuste, Luis Landero y el poema “The stolen orange”, de Brian Patten. Colaboran con obra plástica Javier Fernández de Molina, José Manuel Sánchez Paulete, Hilario Bravo, Antonio Gómez, Laura Covarsí y Germán Grau.

   Reproducimos algunos de los dísticos incluidos en un grupo de poemas, "Materia del olvido" (1986), recogido en libros posteriores (Siquiera este refugio y La vida de otro modo).

 NOMBRADÍA

                   (J.R.J.)

Anterior al oficio del que escribe,

las cosas no existían.


MECÁNICA CELESTE

                   (J.G.)

Confiesas tu pasión por esos signos

que niegan la tristeza.


MEDITACIÓN RURAL

                   (A.M.)

...pasar la tarde toda 

escribiendo por fin un buen poema.

 

jueves, 2 de diciembre de 2021

Entorno claro

  

ENTORNO CLARO

Haikus, Jaiquillas

Carlos Medrano

Mérida, Editora Regional, Col. Poesía, 2021, 73 págs.

    La vida de Carlos Medrano (Salamanca, 1961) ha transcurrido entre Extremadura -su tierra de formación vital y literaria-, Valladolid y Mallorca donde reside desde hace 25 años y es profesor de secundaria. Ha publicado algunos libros: un inicial Corro (Badajoz, 1987), Las horas próximas (Badajoz, 1989), los cuadernos o plaquettes A lo breve (Mérida, 1991) e Imágenes, encuentros (Valladolid, 1996). Tras un cierto periodo de silencio creativo y desconexión insular, en septiembre de 2010 abre un blog llamado Isla de lápices donde ha ido recogiendo su nueva obra escrita desde entonces y otros materiales anteriores. Al margen de otras colaboraciones previas, en los últimos años ha participado en una antología de poetas vallisoletanos, Sentados y de pie, 9 poetas en su sitio (Fundación Jorge Guillén, 2013) y publicado en edición no venal Donde poder volver (Don Benito, 2016). Entorno claro, que ahora publica la Editora Regional de Extremadura, recoge una serie de breves poemas situados en una tradición de la que el poeta da cuenta en un epílogo. En él cita referentes como Antonio Piedra, Francisco Pino o los tankas de Ángel Campos que recogen, con una expresión minimalista (aquella que no puede ser mejorada por la eliminación de algún componente), textos sucintos que captan una mirada a la naturaleza asociada a una emoción tácita o expresa. La naturaleza recogida en los poemas de Carlos Medrano pertenecen a lugares en que vivió (Valladolid, Soria, Yuste y la Vera y Artà, en Mallorca), casi siempre radiante, pero también destructora (tormentas y riadas, seísmos, tsunamis…), que pueden leerse en ocasiones como textos francos (“Ondean penachos / amarillos de juncos / altivos, libres”), pero con mayor frecuencia aparecen hilvanados trazando un sutil desarrollo lineal, pues “la particularidad de este libro consiste en que los poemas que lo forman van escritos en haikus enlazados. Es decir, en un momento dado surgió escribirlos en una sucesión que permitía un poema con un desarrollo mayor al de la imagen puntual contenida en tres versos, capaz así de albergar una reflexión, una pintura más amplia, una escena lograda con una suma en varios tiempos” [Epílogo, pp. 70-71]. Partiendo siempre de la contemplación de la naturaleza (que Guillén condesó en un pentasílabo: “Mira. ¿Ves? Basta”), el poema se abre así a un abanico de sensaciones personales o reflexiones íntimas. Reproducimos uno de los poemas en que ocho haikus enlazados “relatan” la subida a la cima de una montaña y el descenso (subes, cima, altura, “Otro es quien baja”).

CITA

Sin la montaña

no podría la nube

rozar la hierba.

 

Cuando a ella subes

el aire que te envuelve

es la memoria.

 

Y es más profunda

el ala que hacia adentro

toca y te abisma.

 

Desde la cima

la mirada descubre

cada minucia.

 

En ti se unen

la senda y el aroma

de lo que vibra.

 

La voz callada

que en esta lejanía

la altura atiende.

 

La luz persiste

en el trazo imprevisto

de la palabra.

 

Otro es quien baja

y recibe en silencio

la transparencia.

 

martes, 31 de enero de 2023

Carlos Medrano en Don Benito




    La pasada semana visitó Don Benito en el curso de las actividades del Aula Guadiana en el presente curso académico Carlos Medrano (Salamanca, 1961), profesor de enseñanza secundaria y autor de una notabilísima trayectoria poética aparecida dentro y fuera de Extremadura. En  una intervención abierta al público en la Casa de Cultura y en otra ofrecida a los alumnos de bachiller del IES Donoso Cortés y el IES Cuatro Caminos, el poeta repasó su obra desde los libros de juventud aparecidos en la colección Alcazaba de la Diputación pacense hasta su último poemario (Entorno claro) publicado en 2021 por la Editora Regional de Extremadura. Acompañando la recitación con lúcidos comentarios sobre la génesis de cada composición, Carlos dio dos excelentes clases de literatura con reflexiones como esta: “En su logro, la palabra más pura es la que nace del silencio y al respetarlo lo integra. La poesía más vulnerable y primordial reconoce a su vez su insuficiencia. En su interior aspira a la plenitud lograda por música. No otra cosa es la lírica cuando no olvida la belleza ni su relación con la fuente de sí misma en las cosas. La poesía es -a la vez y también- una de las vías de encuentro con la totalidad interrumpida, accesible por tanto al leerla o escribirla, y esa disposición al dirigirse a ella es lo que importa. (“Unas líneas a modo de poética”).

domingo, 9 de julio de 2017

Número extraordinario de Norbania

NORBANIA
REVISTA DE LITERATURA Y CREACIÓN

Cáceres. Asociación Cultural Norbanova, nº 7, 2017, 206 págs.

   Acaba de ver la luz la séptima entrega de Norbania, un número extraordinario con el que la editora de la revista, la Asociación Cultural Norbanova ha querido conmemorar sus diez años de existencia, un periodo en el que, además de la edición de la revista, ha publicado libros en varias colecciones y ha desarrollado una amplia programación de actividades culturales entre las que es preciso destacar el “Aula de la Palabra”.
   Aunque el número de participantes es muy alto, nos parece de interés citar sus nombres. En el apartado de creación poética han colaborado, todos ellos con composiciones inéditas: Basilio Sánchez, Antonio Daganzo, Antonio María Flórez, Mónica Gabriel y Galán, Hilario Jiménez Gómez, Antonio Gómez, Álvaro Valverde, Francisco Caro, Irene Sánchez Carrón, Nicolás Corraliza, Antonio Reseco, Efi Cubero, José Cercas, María Ángeles Pérez López, José M. Jurado García-Posada, Victoria Mera, Jorge S. Arroyo López, Antonio Linares Familiar, Santos Domínguez Ramos, José Manuel Díez, Carlos Medrano, Antonia Cerrato Martín Romo, Miguel Ángel Núñez Paz, Rosa María Perona Timón, Isabel Blanco Ollero, Fernando López Guisado, José Manuel Vivas, Ana Flor Redondo, Caridad Jiménez Parralejo, Marisol Pita, Víctor M. Jiménez Andrada, María Carvajal, Antonio Corredera Plaza y Miguel Ángel Moyano.
   En el bloque de narrativa, han participado, asimismo con composiciones inéditas, Rosa María Lencero, Tomás Pavón, David Lizandra, Victoria Pelayo Rapado, Mariano Mecerreyes Jiménez, Montaña Campón, Pilar López Ávila, José Antonio Leal Canales, Malén Álvarez, Ángela Velasco Bello, Vicente Rodríguez Lázaro, Mario Peloche, Pilar Bacas Leal, Purificación Claver y Manuel Neila.
   En el apartado de reseñas y artículos colaboran Antonio María Flórez, Yolanda Regidor, Ángela Reyes, Santos Domínguez Ramos, José Manuel García, Emilia Oliva Esteban Cortijo, José María Sánchez y Torreño, Francisco Javier Tovar Paz, Alexandre Lacaze y Angélica García Manso.
   Por último, las espléndidas ilustraciones de la revista son obra de Mar Azabal, Matilde Granado, Jesús David Floriano, Miriam A. Gómez Cornejo, José María Jurado, María Polán, Este García, Antonio Corredera Plaza, Ana María Hernández de San Pedro, Julio Díaz Rubio y Deli Cornejo.
   Reproducimos una de las colaboraciones, un poema de Carlos Medrano.


CONFLUENCIA

a Vicente Gallego

Al trasluz de una tarde luminosa
bajo un sol impecable
la flor rosada y blanca del almendro
mece sobre los surcos
el pulso del relieve que circunda:
roca, corteza, lagartija, grieta,
niña que corre o mujer que sueña
con una tarde al sol
que el pintor y ella misma
contemplan a distancia, sin tocarse, sin verse,
y a la vez les sucede
que los envuelve
un ave, una brisa y una fuente
junto a un monte, un camino y una choza.
Luego, la inmensidad del mar
y estas palabras
donde no importa que se ponga el día
si el fuego permanece.

jueves, 29 de enero de 2015

Número seis de Norbania


NORBANIA
REVISTA DE LITERATURA Y CREACIÓN

Jesús María Gómez y Flores [Dir]
Asociación Cultural Norbanova, Cáceres, enero de 2015, nº 6, 104 págs.
Ilustraciones de portada y contraportada de Ana Hernández de San Pedro

   Acaba de ver la luz el  número seis de Norbania, la revista cacereña de creación literaria dirigida por Jesús María Gómez y Flores, que destina parte del precio de cada ejemplar a la Asociación FEAFES (de familiares y personas con enfermedad mental). Colaboran en esta entrega, con composiciones en verso y prosa, José A. Ramírez Lozano, Miguel Bravo Vadillo, Carlos Medrano, Antonio Daganzo, Mario Soler, María Salud Galán, Marino González Montero, Raquel Lanseros, Beatriz Osés, Eduardo Moga, Mónica Gabriel y Galán, Antonio Gómez, María José Fernández, Antonio María Flórez, Mar Gómez Fornés, José Luis Esparcia, Rafael Soler, Paco Rebollo, Fernando de las Heras, Mario Peloche, Javier Pérez Walias, Felipe Ortega Regalado y Miguel Ángel Núñez Paz. Reproducimos un poema de la colaboración de Carlos Medrano (“Cuatro poemas portugueses”).

RELOJ DE ARENA

Aguas del Duero
vertidas al Atlántico,
si no os volviera a ver
qué adiós diría,
podría sentir aquí
ver morir la tristeza.
Fado abierto de Oporto,
puente tendido
desde el recodo
secular del viento.
Un espejismo huir.
¡Tan cerca queda el mar
desde esta orilla!
Sobre el agua se graba
el día entre las barcas.

martes, 12 de marzo de 2024

La imperfección de la belleza

LA IMPERFECCIÓN DE LA BELLEZA

Carlos Medrano

Valladolid, Fundación Jorge Guillén, col. Cortalaire, 2023, 123 págs. 

   Carlos Medrano nació en Salamanca en 1961. Su vida ha transcurrido entre Extremadura -su tierra de formación vital y literaria-, Valladolid y Mallorca, donde reside desde los años 90. Es licenciado en Filología Hispánica (que cursó entre Valladolid y Cáceres) y ha sido hasta hace poco profesor de lengua y literatura en secundaria. En una primera etapa juvenil y universitaria publicó los siguientes libros: Corro (Alcazaba, Badajoz, 1987), Las horas próximas (Alcazaba, Badajoz, 1989). También otros cuadernos o plaquettes como A lo breve (La Centena, Editora Regional de Extremadura, 1990), Imágenes, encuentros (POEMAS, Proyectos Originales Ediciones Marginales Anómala Sociedad, Valladolid, 1996) y Entorno claro (Mérida, Editora Regional, 2021). Participó en algunas antologías como Abierto al aire (1971-1984) (Editora Regional de Extremadura, 1984), coordinada por Ángel Campos Pámpano y Álvaro Valverde, o Diez años de poesía en Extremadura (1985-1994) (Ayuntamiento de Cáceres, 1995), al cuidado y estudio de Miguel Ángel Lama.

   Tras varios años de silencio, en septiembre de 2010 abrió el blog isla de lápices donde ha ido recogiendo su nueva producción y algunos textos anteriores, acompañada a veces de algunos comentarios cercanos al diario y la reflexión literaria. De este fondo ha ido apareciendo en papel Donde poder volver (Vberitas, Don Benito, 2016), una muestra de poemas del blog; el libro de haikus enlazados Entorno claro (Editora Regional de Extremadura, 2021); o lo seleccionado para una antología de poetas vallisoletanos, Sentados o de pie, 9 poetas en su sitio (Fundación Jorge Guillén, Valladolid, 2013) y la colaboración para el nº 11 de la revista Suroeste. Junto a Juan Ricardo Montaña ha colaborado en el libro homenaje a Santiago Castelo Aire por aire (Vberitas, 2015), y ha coordinado el dedicado a Ángel Campos Pámpano Recobrada memoria (Vberitas, 2022). 

   Ahora la Fundación Jorge Guillén publica La imperfección de la belleza, dividido en tres bloques, “Un movimiento interrumpido”, “Emerger” y “La memoria tranquila”. Partiendo del motivo oriental recogido en el título (la belleza también está sometida al paso del tiempo y, por tanto, a la trasformación, a la imperfección: “La belleza se arriesga en lo difícil. / La orquídea, el colibrí / cruzan también la muerte”), los poemas transitan por motivos universales como la naturaleza en estampas de Mallorca, pero también de paisajes vividos en el pasado (“De donde hemos querido, nunca nos vamos del todo. Y con sólo pensar, permanecemos”) como Castilla, Portugal (Sesimbra, Évora) o Extremadura (Jaraíz, Yuste) en los que la observación se une a la reflexión y al recuerdo. Otros textos acogen como tema la amistad con otros tantos escritores de quien se siente próximo estética o emocionalmente (Francisco Pino, Santiago Castelo, Tomás Sánchez Santiago, Ángel Campos, Álvaro Valverde…). El último bloque, del que reproducimos una de las composiciones, conforma una elegía dedicada a la madre fallecida, comunicada con el tono de un dolor sedimentado y un lenguaje sobrio y cuidadosísimo en su selección.

 

ISABEL

Una paloma, amor, mujer que vuela,

mi madre ya partió, retengo ahora

su última mano que es la mía

y el hueco de su huella mudo expresa

esta separación, la hora

donde el aliento eleva la tibieza

querida de aquella carne y luz

no abandonada, menos rota.

Hoy sostienen mis huesos entera tu estatura.

Aunque te vayas, más cerca ahora ves.

Aquí en mi cuerpo te ofrezco que residas.

Yo soy también lo que tú eras.

Contemplo la levedad hermosa de tu alma:

qué ventana no da dolor abierta a la belleza

que hoy por doquier asalta.

Madre, mira la gratitud continua de la vida,

el reposo maestro de tu ternura y nombre.

Nacido de tu ser; este latido

da fe del mundo que ante ti se entrega.

lunes, 16 de enero de 2023

Carlos Medrano en el Aula Guadiana



   Carlos Medrano nació en Salamanca en 1961. Su vida ha transcurrido entre Extremadura -su tierra de formación vital y literaria-, Valladolid y Mallorca, donde reside desde los años 90. Es licenciado en Filología Hispánica (que cursó entre Valladolid y Cáceres) y ha sido hasta hace poco profesor de lengua y literatura en secundaria. En una primera etapa juvenil y universitaria publicó los siguientes libros: Corro (Alcazaba, Badajoz, 1987), Las horas próximas (Alcazaba, Badajoz, 1989). También otros cuadernos o plaquettes como A lo breve (La Centena, Editora Regional de Extremadura, 1990), Imágenes, encuentros (POEMAS, Proyectos Originales Ediciones Marginales Anómala Sociedad, Valladolid, 1996) y participó en algunas antologías como Abierto al aire (1971-1984) (Editora Regional de Extremadura, 1984), coordinada por Ángel Campos Pámpano y Álvaro Valverde, o Diez años de poesía en Extremadura (1985-1994) (Ayuntamiento de Cáceres, 1995), al cuidado y estudio de Miguel Ángel Lama. Y el cuadernillo de su participación en el Aula de literatura de Navalvillar de Pela (1996). Tras varios años de silencio, en septiembre de 2010 abrió el blog isla de lápices donde ha ido recogiendo su nueva producción y algunos textos anteriores, acompañada a veces de algunos comentarios cercanos al diario y la reflexión literaria. De este fondo ha ido apareciendo en papel Donde poder volver (Vberitas, Don Benito, 2016), una muestra de poemas del blog; el libro de haikus enlazados Entorno claro (Editora Regional de Extremadura, 2021); o lo seleccionado para una antología de poetas vallisoletanos, Sentados o de pie, 9 poetas en su sitio (Fundación Jorge Guillén, Valladolid, 2013) y la colaboración para el nº 11 de la revista Suroeste. De lo compartido en el blog queda dar orden y composición a algún libro más ahí latente. Junto a Juan Ricardo Montaña ha colaborado en el libro homenaje a Santiago Castelo Aire por aire (Vberitas, 2015), y ha coordinado el dedicado a Ángel Campos Pámpano Recobrada memoria (Vberitas, 2022).

miércoles, 18 de diciembre de 2019

El espejo



EL ESPEJO

Hilario Jiménez Gómez y Carlos García [Dirs]
Badajoz, Asociación de Escritores Extremeños, 2019, 106 págs.
Diseño de portada y contraportada de Juan Ricardo Montaña

   De periodicidad anual, El espejo es la revista de la Asociación de Escritores Extremeños cuyo decimoprimer número, dedicado a la memoria de Julián Rodríguez (Ceclavín, 1968) acaba  de aparecer. Tras un texto preliminar del presidente de la AEEX, Juan Ramón Santos, el número se abre con un ensayo de Javier Doce sobre la traducción (“Hablo por nosotros. Algunas notas sobre la traducción de poesía”), al que siguen textos, acompañados de las correspondientes traducciones, de Yves Namur (Namur, Bélgica, 1952), traducidos por Emilia Oliva; de Liberato Vieira da Cunha (Cachoeira do Sul, Brasil, 1945), vertido al español por Antonio María Flórez; Tolentino Mendoza (Madeira, Portugal, 1965), en versión de Luis Leal; Choman Hardi (Kurdistan-Irak), traducido por Irene Sánchez Carrón; Giuseppe Ungaretti (Alejandría, Egipto, 1888), traducido por María José Flores; Alfonso Cruz (Figueira da Foz, Portugal, 1971) en versión de Juan Ramón Santos, y Hector Malot (La Bouille, Francia, 1830), traducido por Ángela Sayago Martínez.  
   Tras una entrevista a Juan Ricardo Montaña (Don Benito, 1949), escritor y artista visual colaborador de la revista desde 2016, se incluyen en el bloque de “Colaboraciones literarias” haikus de: Montaña Campón, Efi Cubero, José García Alonso, Carlos García Mera, Antonio Gómez, Adolfo Gómez Tomé, Jesús María Gómez y Flores, Teresa Guzmán, Carmen Ibarlucea, Hilario Jiménez Gómez, Luis Leal, Pilar López Ávila, Mario Lourtau, Carlos Medrano, Eladio Méndez, Juan Ricardo Montaña, Elías Moro, Antonio Orihuela, Gabino Sánchez Llamazares, Ángel Sayago Martínez y Víctor Valadés Paredes.
   La presente entrega se cierra con notas de lectura de Manuel Pecellín (Divan del Tamarit / Sonetos del amor oscuro, en edición de Hilario Jiménez Gómez), Víctor M. Jiménez Andrada (El embrujo apasionado, de Vicente Rodríguez Lázaro), Enrique García Fuentes (La bella Magalona, de Marino González Montero), Juan Ramón Santos (La escapada, de Gonzalo Hidalgo Bayal), Paula Merlán (Las hermanas pequeñas de las letras divertidas. Cuentos de la A a la Z, de Pilar López Ávila y María Luisa Torcida), Antonio Reseco (Mi padre, de Eduardo Moga), Ysabel Meseguer (Perro ladrando a su amo, de Javier Sánchez), Jesús María Gómez y Flores (Poesía a tres bandas: José Antonio Patrocinio, Hilario Jiménez y Rosario Troncoso), Vicente Rodríguez Lázaro (Sombras en el espejo, de Luis Corrales García), Antonio Salguero Carvajal (Tres lecturas: Juan Ramón Santos, Antonio Reseco y Encarnación Ponce), José García Alonso (Una chica sin suerte, de Noemí Sabugal) y Adolfo Gómez Tomé (Y el lugar era agua, de Lorine Niedecker).





martes, 29 de enero de 2019

En el vuelo de la memoria



EN EL VUELO DE LA MEMORIA
Antología para Ángel Campos

Suso Díaz [Coord]
Mérida, Editora Regional de Extremadura, 2018, 137 págs.
Nota liminar de Suso Díaz
Prólogo de Miguel Ángel Lama
Ilustración de cubierta de Javier Fernández de Molina

   Con ocasión del décimo aniversario de la muerte del poeta, vio la luz el pasado mes de noviembre una antología de homenaje a su memoria coordinada por Suso Díaz, quien se propuso desde un primer momento “convocar a los poetas y centrarlos en  el legado de Ángel […] cada poema de este libro tenía que estar ligado a su verso, ser parte de él sin él, intentar atrapar el reflejo del espejo en que cada uno nos miramos, siendo cada espejo un Libre suyo, un fragmento de su voz recogida por nosotros” [p. 11].
   En el apartado titulado “Envío” del prólogo a la antología (“Espiral de voces, textos, días y años”), el profesor Miguel Ángel Lama afirma: “A Suso Díaz. Orensano de Ludeiros y de Mérida. Ahí te llegan estas páginas dedicadas en homenaje al amigo, en las que hay saturados -la herida es honda- unos cuantos escritos antiguos a él dedicados. Hay tantos amigos de él en estas páginas, y, sobre todo, tantos de sus lectores y admiradores, que escriben en catalán, en gallego, en portugués, en el crisol de lenguas que le habría gustado. Y un crisol de poemas muy diversos en los que inevitablemente, se insiste -y es curioso y determinante- en su primer libro, La ciudad blanca, y en el último, La semilla en la nieve” [p. 23].
   Colaboran en el proyecto los siguientes poetas: Ana Homen de Albergaria, Mamen Alegre, Alfonso Alegre Heitzmann, Orlando Alves, José Luis Bernal Salgado, Ezequías Blanco, María Blázquez, Paula Campos Fernández, Pureza canelo, Joaquim Cardoso Dias, María Carvajal, Ana Mª Castillo Moreno, Inma Chacón Álex Chico, Ben Clark, Jean Gabriel Cosculluela, Efi Cubero, José María Cumbreño, Suso Díaz, José Manuel Díez, Antonio María Flórez, Francisco Fuentes, Julio César Galán, Antonio Gamoneda, Carlos García Mera, Antonio García Teijeiro, Guillén Gavaldá, Antonio Gómez, Joaquín Gómez, Diego González, Marino González Montero, Pablo Guerrero Cabanillas, Fernando de las Heras, Carmen Hernández Zurbano, Gonzalo Hidalgo Bayal, Manuel Hurtado Dadrique, Víctor Manuel Jiménez Andrada, Hilario Jiménez Gómez, Nuno Júdice, José María Lama, Ana Paula Lavado, Faustino Lobato Delgado, Mario Lourtau, Mario Martín Gijón, Carlos Medrano, Eladio Méndez, Isabel Méndez, Elías Moro, Antonio Orihuela, Mila Ortega, Luis Pastor, Urbano Pérez Sánchez, Javier Pérez Walias, Antonio F. de Pina, Cândida Pinto, José Antonio Ramírez Lozano, Baldo Ramos, Antonio Reseco González, João Manuel Ribeiro, David Eloy Rodríguez, Xavi Rosell, Antonio Sáez Delgado, Luis Sáez Delgado, Ada Salas, Basilio Sánchez, Irene Sánchez Carrón, Jonás Sánchez Pedrero, Tomás Sánchez Santiago, Antonio Carlos Santos, Juan Ramón Santos, Lília Tavares, Gonçalo M. Tavares, Álvaro Valverde, Ruy Ventura, Helena Villar Janeiro, José Manuel Vivas y José Antonio Zambrano.
   Por deferencia a los colaboradores lusos del proyecto reproducimos el poema de Nuno Júdice.

VIDA

O homem está sentado numa raíz de árvore,
não tem o abrigo do horizonte que a nevoa
esconde, falta-lhe o eco de palabras antigas
há muito apagadas pelo vento da noite. Porém,
este homem enrola o tabaco na mortalha
para começar o dia. Un pássaro sai de dentro
da manhã e rompe o frio que envolve
a terra. O silêncio esvazia de pensamentos
os seus olhos, como se o homem nao fosse
mais do que uma peça nesta paisagem
de duros contornos. Por fim, o homem
levanta-se e olha à sua volta, à procura
de um caminho. Pedra sobre pedra,
nos muros reconhece a luz do dia, a água
da chuva, a sombra vertical dos verões.

E o dia começa à sua frente.

viernes, 8 de enero de 2016

Aire por aire


AIRE POR AIRE
A Santiago Castelo

Juan Ricardo Montaña (Ed.)
Don Benito, Vberitas, 2015, 69 págs.

   Entre los numerosos y merecidos homenajes que vienen dedicándose a la memoria de José Miguel Santiago Castelo es preciso mencionar el del colectivo dombenitense Vberitas, coordinado por Juan Ricardo Montaña, que ha reunido en un volumen textos de numerosos amigos del poeta (precisamente, la amistad es uno de los temas recurrentes en la trayectoria de Castelo, desde Tierra en la carne hasta La sentencia, su último libros de poemas). En él han colaborado José Luis Bernal Salgado, Pureza Canelo, Manuel Cerrato Quintero, Carmen Fernández-Daza Álvarez, Jesús Mª García Calderón, Carlos García Mera, Teresa Guzmán Carmona, Luis Ledo, Jesús Lillo Criado, Marisa de Llanos Pérez, Carlos Medrano, Pilar Molinos, Juan Ricardo Montaña García, Manuel Núñez García, Antonio Reseco Álvarez, Basilio Sánchez, Álvaro Valverde y José Antonio Zambrano. Reproducimos el texto con que se cierra el volumen (un libro realizado con el esmero y la pulcritud con que Juan Ricardo elabora todos su proyectos), una evocación del poeta situada en el cementerio de Granja de Torrehermosa, donde el poeta se sabía dueño de “un huerto / sembrado de cruces / y un ciprés de sombra / y melancolía…”

VUELTA CASA

Una luz rabiosa hiere la cal del camposanto entre plantas soñolientas. Hace calor. En el recinto reina una paz infinita y hay un alegre trinar de colorines. De vez en cuando se hace el silencio. En el cielo limpio y azul de Extremadura, otros azules del Caribe y del mediterráneo han venido a este concierto de alas multicolores. No es un cementerio triste, sino solemne. Todos están, de nuevo en la casa, esperando a que llegaras para cerrar la puerta. Yo descanso mi pena sobre la baranda, infinita como tu grandeza. Tengo detrás tu cuerpo, la cal, el trino y los cipreses. Delante el pueblo. Entre mi pena y la torre hay un mar de espigas doradas que demoraron la siega para esperarte. Tú lo dijiste, ¿recuerdas?: “vendré por las amapolas, por el trigo, cada tarde…”. Sobre sus ramas, las encinas centenarias lloran atardeceres púrpuras.

En el malecón de La Habana, un danzón de espuma y sal.

Este mayo se nos va en un domingo de primavera herida, ya para siempre. Descansa en paz, mi querido amigo.

En Granja de Torrehermosa, a 31 de mayo de 2005
Juan Ricardo Montaña García