martes, 8 de noviembre de 2022

Marquetalia en el corazón

MARQUETALIA EN EL CORAZÓN

Antonio María Flórez

Don Benito, ACEM. La cigüeña de cristal, 2022, 126 págs.

Presentación del autor

Nota biográfica y bibliografía de Beatriz Elena Flórez


   Hijo de madre extremeña y padre colombiano, Antonio María Flórez (Don Benito, 1969) pasa su infancia en Marquetalia (Colombia), pero recibe su formación académica de grado medio en los centros docentes de Don Benito. Circunstancias biográficas posteriores le han llevado a alternar estancias en Colombia y España, lo que lo ha convertido en privilegiado testigo del panorama cultural de los dos países. Además de novelas (El hombre que corría en el parque, 2021), cuentos (Desde entonces vivo para el dolor, 2018) y ensayos (como Dalí. El arte de escandalizar, 2004 o Transmutaciones. Literatura colombiana actual, 2009) y numerosas colaboraciones en obras colectivas (antologías de cuento y de poesía, revistas…) ha publicado hasta el momento los siguientes libros de poesía, galardonados con premios de reconocido prestigio: El círculo cuadrado (1987), En cámara lenta, junto con el escritor Flobert Zapata (1989), Epigolatría (1993), ZOO (poemillas de amor antiecológicos) (1993), El bar de las cuatro rosas (1995) y Antes del regreso (1997). A este libro le siguieron títulos como El arte de torear (2002),  Desplazados del paraíso (premio nacional de poesía “Ciudad de Bogotá” de 2003, publicado ese año en Colombia y luego en España en 2006), Marquetalia (Un pueblo que rabia) (2003), Corazón de piedra (2011), Tauromaquia (Antología Trema) (2011), Bajo tus pies la ciudad (2012), Sabe que su mirada (2014), La muerte de Manolete. Crónica en escena (Don Benito, 2014), Enlas fronteras del miedo (2013, finalista del premio nacional de poesía del Ministerio de Cultura de 2015) y Sueños eróticos de un adolescenteempedernido (2016).

   Ahora la Asociación Colombo-española de Manizales publica Marquetalia en el corazón, una antología temática sobre la ciudad en que el poeta vivió gran parte de sus años infantiles y juveniles, una iniciativa personal con la que contribuir a conmemorar el centenario de la erección de la ciudad como municipio en 1924. Con composiciones seleccionadas de cuatro de sus libros, el resultado es un “un acto de amor por mi pueblo adoptivo y mis seres queridos, por los sufridores y caídos en sus tantas tragedias y desastres naturales; y también por los desplazados forzosos y por aquellos que la han abandonado y la abandonan en pos de sus más altos sueños” [Presentación, pp. 11-12]. Reproducimos una de las composiciones.

 

LLUEVE

 

Mi vida se diluye

en las brumas de las montañas:

                   Llueve sobre Marquetalia.

 

         Ondulas los días

el vértigo del tiempo.

         Así,

recostado sobre el fragor del agua

busco una nueva identidad

con el mundo.

 

         Llueve y llueve sobre mi vida.

                   Llueve.

 

         El agua socava

mi piel y los senderos,

                   insidiosa y mansamente.

                            Llueve.

 

         El tiempo y el espacio

se diluyen lentamente en el silencio

                                               se hacen nada.

 

         La memoria evoca

las montañas,

         los caminos,

                   los abrazos,

y sueño con la inquietante

                   luz de tu mirada.

 

         Llueve.

Llueve sobre el despojo de las horas,

         sobre el paisaje brumo que me ciega,

sobre sus manos implorantes,

         sobre la patria desvalida del destierro.

 

         Un rayo corta la mañana

y el trueno alborota

las reliquias del agua

en mi consciencia:

                            Llueve.

 

         Llueve sobre Marquetalia:

                                               Llueve.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario