LOS PÁJAROS DE AUSCHWITZ
Arno Surminski
Barcelona, Salamandra, 2013,
186 págs.
Trad. del alemán de María Dolores Ábalos
Los pájaros de Auschwitz relata una de esas
pequeñas historias periféricas a la tragedia del Holocausto, basada en un
desconcertante hecho real. Durante la
Segunda Guerra Mundial vio la luz en una revista científica de Viena un trabajo
titulado “Observaciones acerca de la avifauna de Auschwitz”, realizado por un
biólogo movilizado y destinado como guardia de las SS en el campo de 1940 a
1941. Para dibujar las aves contará con la ayuda de un joven polaco estudiante
de la Facultad de Artes y Ciencias de la Universidad de Cracovia al que los
alemanes hicieron prisionero tras la invasión de Polonia en septiembre de 1939.
El contraste entre ambos personajes tiene su correlato en el que enfrenta el
libre ámbito de las aves con el infierno vallado del campo de concentración
“Por los
Beskides, cuyas cumbres nevadas se divisaban en los días despejados, seguían
llegando gansos silvestres que sobrevolaban el campo de concentración, ajenos a
lo que ocurría allí abajo. Las cigüeñas rezagadas de las grandes migraciones
también sobrevolaban en silencio la zona entre ambos ríos. ¿Podrían anidar en
un lugar como Auschwitz? A las cigüeñas, portadoras de vida, nada se les había
perdido en el crematorio, que no dejaba de humear, ni en las apestosas fosas
comunes. En cambio, las golondrinas, pese a que siempre tenían prisa por llegar
a sus nidos, se entretenían mucho en aquella zona entre los ríos. En su honor,
la orquesta del campo tocaba Las
golondrinas de Austria” [pp.55-56]